Friedrich Wilhelm Heinrich Alexander von Humboldt
Geógrafo, geólogo, explorador, naturalista, humanista...
(Berlín, 14–09–1769 / Berlín, 06–05–1859)
Por Roger A. Jiménez A.
Asociación Larense de Astronomía, ALDA.
Friedrich Wilhelm Heinrich Alexander von Humboldt, el alemán más famoso de su tiempo. Mejor conocido como Alexander von Humboldt, fue un polímata: geógrafo, astrónomo, humanista, naturalista, explorador y autor entre otras áreas del conocimiento humano y científico. Considerado como el hombre de ciencia más eminente y trascendente de su época. Sus trabajos científicos realizaron contribuciones sustanciales a la geografía, geología, geofísica y meteorología. Durante gran parte de su vida estuvo asociado con la corte prusiana, llegando a ser en última instancia asesor científico de sus gobernantes. El retrato pintado con que inicia esta biografía es un óleo de Joseph K. Stieler, realizado en 1843.
De ascendencia alemana y francesa, Alexander von Humboldt nació en Berlín el 14 de septiembre de 1769, en el seno de una familia económicamente muy bien acomodada, ello le permitió estudiar en las mejores y más reconocidas instituciones de la época, como las Universidades de Frankfurt an der Oder, Göttingen y la Escuela de Minas de Freiberg. Su padre, Alexander Georg von Humboldt, un Mayor del ejército prusiano, murió cuando Alexander tenía 9 años. Tras la muerte de su padre, su madre María Elisabeth Colomb, una mujer de carácter regio y temperamento “frío y distante”, perteneciente a la corte prusiana, a su burguesía, y a la burguesía notálica de Francia, dejó de vincularse con la corte, pero esto no implicó aislar la familia de esta, por el contrario, empleó excelentes tutores privados para que Alexander y su hermano Wilhelm, se prepararan para iniciar su camino dentro de la élite burguesa.
Alexander Georg von Humboldt (izquierda) y María Elisabeth Colomb von Humboldt (derecha), padres de Alexander von Humboldt. Óleos de Johann Heinrich Schmidt, 1775 Crédito de las imágenes: © Stiftung Stadtmuseum Berlin.
De niño, Alexander tenía la afición de recolectar y etiquetar diferentes plantas, insectos y conchas. De esta manera se ganó el cariñoso apodo de “pequeño boticario”. Su interés por la botánica lo desarrolló desde muy joven. Cuando era adolescente, pasó muchas horas con Karl Willdenow, uno de los principales botánicos de Europa, recolectando y clasificando plantas en los bosques de Berlín. En esta etapa juvenil de su vida, también desarrolló amistades y relaciones con notables escritores, ente los que destacan Goethe y Schiller.
Su educación se vio marcada por las ciencias, área destacada en las mejores escuelas e institutos de la época a las cuales asistió. Aunque de niño la vida militar llamaba su atención, tras la muerte de su padre, su madre lo conminó hacia la política y la economía, motivo por el cual a sus 18 años tuvo la intención de emprender una carrera en esas áreas, llegando a tomar cursos de finanzas durante seis meses en la Universidad de Frankfurt an der Oder en 1787 y luego en la Universidad de Göttingen. Contrariamente a su intención, estos ambientes despertaron nuevamente en él su pasión por la naturaleza, específicamente por la botánica, la geología y la mineralogía, estas dos últimas áreas, lo llevaron a cursar estudios en 1790 en la Escuela de Minas de Freiberg, Sajonia, un año después de escribir su ensayo "Observaciones mineralógicas sobre varios basaltos en el río Rin", trabajo que le facilito su ingreso a esta casa de estudios. En ese entonces, un día típico de Humboldt transcurría bajo tierra en las minas por la mañana, en las clases por la tarde y por la noche paseando por el campo circundante buscando plantas interesantes.
En todas estas universidades, sus principales maestros, reavivaron y afianzaron su interés por la geografía política, la botánica y la exploración. Pero fue en 1789 en la universidad de Göttingen, que conoció a Johann Forster, uno de los mejores naturalistas del mundo para la época, quien tenía en su currículo el haber acompañado a James Cook, célebre capitán inglés de la Royal Navi, durante sus viajes de descubrimiento y exploración desde Oceanía hasta el Pacífico norte. La cercanía, relación de trabajo y amistad con Foster permitió a Humboldt acompañarlo en sus expediciones por Francia, Inglaterra y los Países Bajos, en ellas, Humboldt aprendió las técnicas de observación científica, clasificación de plantas y medición precisa que emplearía a lo largo de su larga e increíblemente productiva carrera.
Johann Georg Adam Forster, naturalista alemán. Óleo de J. H. W. Tischbein, 1781. Crédito de la imagen: © Stiftung Stadtmuseum Berlin.
En 1790, Humboldt comenzó a trabajar en geografía vegetal, sus trabajos en este campo revolucionarían la botánica. Su trabajo botánico estuvo muy influenciado por filósofos naturales alemanes como Immanuel Kant. Kant creía que había una unidad causal subyacente en la naturaleza y que la Tierra debería verse como un todo único e interconectado. Humboldt extendió estas ideas al estudio de las plantas, buscando crear una ciencia botánica universal y holística que abarcara tanto la diversidad como la conexión del mundo natural. En sus propias palabras expresó: "La ciencia sólo puede progresar... reuniendo todos los fenómenos y creaciones que la tierra tiene para ofrecer... nada puede considerarse aislado... La naturaleza, a pesar de su aparente diversidad, es siempre una unidad".
En 1792 se unió al departamento de minería del gobierno prusiano, y la promoción llegó rápidamente, meses después fue nombrado asesor de minas de Berlín. Durante estos cinco años no dejo que su trabajo de asesorías desplazara sus observaciones e investigaciones científicas en el área. Una observación que hizo durante sus trabajos, resultó crucial en sus investigaciones posteriores sobre las cualidades magnéticas de las rocas, inventó una lámpara de seguridad, un respirador mejorado y escribió un libro sobre plantas subterráneas. Un innegable aporte a la institución fue la creación y apertura de una escuela de mineros.
La madre de Humboldt muere en 1796, con lo que él se hizo lo suficientemente rico para pensar en especializarse y planificar viajes expedicionarios por el mundo. Así, luego de estudiar varias técnicas de investigación botánica, observación meteorológica y estimación de la altura a partir de lecturas barométricas, comenzó a planificar un viaje de exploración de 5 años al nuevo continente.
Los trabajos, experiencias e invenciones en el departamento minero del gobierno prusiano, le generaron destacables antecedentes. Finalmente, su preparación y aptitud le abrieron el camino para su primer viaje de exploración. Junto con Aimé Bonpland, reconocido médico y botánico francés, viajó a Madrid para presentar su proyecto de exploración y solicitar el permiso especial y necesario en ese momento para explorar las colonias de la corona española en Sudamérica y el Caribe. Las credenciales que los respaldaban y acuerdos a los que llegaron con el rey Carlos IV de España, les valió el financiamiento de su viaje por la corona. La reconocida travesía de exploración científica, emprendida por Alexander von Humboldt y Aimé Bonpland, se llevó a cabo entre 1799 y 1804, la misma fue conocida como la expedición Humboldt–Bonpland a Centroamérica, Sudamérica y Cuba.
Aimé Bonpland. Medico y botánico francés. Crédito de la imagen: Science photo library.
Mapa de la expedición de Alexander von Humboldt a América (1799-1804). Crédito de la imagen: Dominio público en internet.
En esta, su primera expedición, Humboldt exploró los territorios de lo que hoy son Venezuela, Cuba, Colombia, Ecuador, Perú y México. La cronología de la expedición registra que la misma zarpó el 05 de junio de 1799 a bordo del barco Pizarro. Hicieron una parada de 6 días en Tenerife, donde exploraron el volcán Teide. Retoman el rumbo hacia las Indias Españolas con dirección a La Habana y México, pero una epidemia de fiebre tifoidea desatada en la embarcación los hace desviarse hacia tierra firme y desembarcando en Cumaná, oriente de Venezuela, el 16 de julio.
Destacando su ruta en Venezuela, Humboldt y Bonpland recorren la península de Araya, Cumanacoa, el valle de Caripe, la cueva del Guácharo, el lago de Guanoco, las misiones de San Fernando y otros lugares del actual oriente venezolano. Posteriormente continúan hacia al puerto de La Guaira, haciendo escala en Higuerote, desde donde Bonpland continúa el viaje por tierra hacia Caracas. El 20 de noviembre, llega Humboldt a La Guaira y emprende marcha hacia Caracas para reencontrarse con Bonpland, una vez reunidos, son recibidos por el gobernador y capitán general Manuel de Guevara Vasconcelos, quien se ocupa de atenderlos en su estancia en la ciudad. Instalados, ambos viajeros (Humboldt y Bonpland) se dedican a explorar los alrededores de la ciudad, y el 2 de enero de 1800 ascienden a la Silla de Caracas que, junto al Pico Naiguatá y el Cerro el Ávila, conforman la cadena montañosa que los aborígenes llamaban Guaraira Repano. Los acompañó Andrés Bello, quien pronto sería reconocido como El Patriarca de las Letras Americanas. Luego parten hacia los valles del Tuy y Aragua, visitan Antímano, La Victoria, Turmero, Maracay, Valencia, Guacara, Las Trincheras y Puerto Cabello. Desde allí, se dirigen a los llanos centrales pasando por Calabozo y San Fernando de Atabapo. Siguen hacia la Guayana venezolana y recorren los pueblos de misión hasta llegar a San Carlos de Río Negro. Exploran el río Orinoco, sus afluentes y en particular el brazo Casiquiare del cual determinó su longitud y latitud, este río es un peculiar afluente que comunica las cuencas del Orinoco y el Amazonas. En el río Orinoco descubre el delfín del Amazonas, una especie de Delfín de río. Visitan Angostura (actual Ciudad Bolívar) y desde allí se dirigen por El Pao a Barcelona y luego a Cumaná, terminando así el recorrido por el territorio de Venezuela y partiendo a Cuba.
Alexander von Humboldt y Bonpland, en la selva amazónica del río Casiquiare (Óleo de Eduard Ender, hacia 1850). Crédito de la imagen: Dominio público en internet.
Dos estancias tuvo la expedición en Cuba, del 19 de diciembre de 1800 hasta el 15 de marzo de 1801 y del 19 de marzo hasta el 29 de abril de 1804. En ambas ocasiones estuvo de tránsito, primero camino de Venezuela a Colombia, y en la siguiente, de México a Estados Unidos. Sin embargo Humboldt incansable como siempre, aprovecho este tiempo para estudiar la topografía de la isla como un modelo de las islas del Caribe, vistas como una frontera geográfica entre América del Norte y América del Sur.
De su primera estancia en Cuba, regresaron a América del Sur para una extensa exploración de los Andes, desde Bogotá, Colombia a Trujillo, Perú, deambularon por el altiplano andino, siguiendo una ruta ahora atravesada por la Carretera Panamericana. Subieron varios picos, incluidos todos los volcanes en los alrededores de Quito, Ecuador. El ascenso de Humboldt al Chimborazo (6.310 m), pero por debajo de la cumbre a una altura de 5.878 m, fue un récord mundial de montañismo durante casi 30 años. Humboldt y Bonpland sufrieron mucho por mal de montaña. Fue Humboldt quien se convirtió en el primero en atribuir el mal de montaña a la falta de oxígeno en el aire enrarecido de las grandes alturas. Cuando hubo terminado su exploración de los Andes, se dedicó al estudió de la corriente oceánica frente a la costa oeste de América del Sur.
En la primavera de 1803, los dos viajeros zarparon de Guayaquil a Acapulco, México, donde pasaron el último año de su expedición. Allí estudiaron la cultura azteca. Humboldt observó con entusiasmo las reliquias de esta civilización, sus técnicas de cultivo, ciclos de siembras y su relación con la naturaleza. De México partieron a Cuba por segunda vez, allí Humboldt decidió aprovechar la cercanía a Norte América y para extender la expedición y realizar una visita a los Estados Unidos.
Durante su estancia de tres semanas en Estados Unidos, el presidente Thomas Jefferson, lo tuvo como "huésped" en Washington DC y Filadelfia. Ambos intercambiaron puntos de vista políticos, geográficos y económicos. Jefferson aprovechó de sondear las ideas de su huésped acerca de los límites de EE.UU. con relación a los ríos Sabina y Grande, así como a la construcción de un canal interoceánico, tal fue su interés, que ordenó al Secretario del Tesoro, Albert Gallatin hacer copias de los mapas y otros materiales del científico.
Como resultado de las observaciones y el estudio de los datos recabados en esta exploración científica por el nuevo continente, Humboldt sugirió varias mejoras en la tecnología minera y otros aspectos de la economía a las autoridades coloniales españolas. Los aportes fueron innumerables, las conclusiones sobre sus observaciones contribuyeron sustancialmente a sentar las bases de las ciencias de la geografía física y la meteorología. La principal corriente oceánica frente a América del Sur, fue estudiada en detalle por Humboldt, como reconocimiento a ello, una vez llevó su nombre, aunque en la actualidad se llama Corriente del Perú. En los andes suramericanos, principalmente los picos del Perú, estudió y definió la relación entre la temperatura, la presión atmosférica y la altitud. Trazó un mapa del Alto Orinoco hasta su unión con un afluente del Amazonas. Descubrió el ecuador magnético. También hizo observaciones asociadas a la astronomía, específicamente observaciones meteóricas y flujos de estas, que condujeron al descubrimiento de la periodicidad de las lluvias de meteoros. Resalta en este aspecto la observación que hicieron Humboldt y Bonpland en Cumaná en 1799, donde vieron la lluvia de millares y millares de estrellas fugaces y bólidos de fuego cayendo durante cuatro horas consecutivas (lluvia de meteoros Leónidas). Analizó e investigó las propiedades fertilizantes del guano, utilizado por los indígenas. El par de científicos logró recolectar unos 60.000 especímenes de plantas, clasificando y descubriendo muchas de ellas. Humboldt fue el primer científico en darse cuenta de la importancia de los bosques para el ecosistema de la tierra, así como de los peligros de la deforestación reiterada, acción que ocasiona la degradación y erosión de los suelos; basado en estos aspectos delineó su estrecha relación.
Desde 1804 hasta 1827, Humboldt residió principalmente en París, allí se dedicó a evaluar los resultados de su expedición. Ese período como escritor y científico, publicó a finales de la primera década de 1800 los cálculos detallados sobre las condiciones climáticas en las que se podían y debían cultivar las vides. Pero la materialización de su trabajo durante la exploración científica al nuevo continente, lo alcanza publicando su narrativa personal sobre su expedición, primero en francés en 1814 – 1819, y luego una traducción en inglés en 1825; entre sus lectores y admiradores estaba Charles Darwin.
Luego de divulgar sus trabajos y conclusiones sobre su primera expedición, se le atribuye a Humboldt haber establecido el uso de isotermas en la elaboración de mapas, el origen y curso de las tormentas tropicales, el aumento de la intensidad magnética desde el ecuador hacia los polos y diversos efectos geológicos asociados al vulcanismo. Además, se constituyó en el precursor en la relación entre entorno geográfico y distribución de plantas.
Humboldt no solo hacia ciencia, sino que también investigaba la relación de esta en el desarrollo social, económico y productivo de la civilización. Observó muy temprano, e incluso proyectó, el efecto que las prácticas humanas asociadas al desarrollo en general, estaban ocasionando al medio ambiente. Sin duda fue un visionario, predijo incluso el cambio climático futuro a causa de las prácticas de la humanidad. Desde este punto de vista, rechazó temprano el fin puramente utilitarista de la ciencia, enfatizando en cambio, el valor de la investigación por el conocimiento. Esto le permitió dar una consideración imparcial a los problemas de las ciencias sociales. En el campo de la antropología, por ejemplo, supo apreciar sin prejuicios la cultura de las tribus indígenas de Sudamérica, ya que no creía en razas superiores o inferiores sino en la unidad de la humanidad y su destino de libertad. En su célebre Ensayo político sobre el Reino de Nueva España (1811-1812), sentó las bases de la geografía regional moderna sobre la base de la geografía física, utilizando a México como ejemplo. Su retrato del dominio colonial se basa en pruebas estadísticas, ya que Humboldt logró acceder a los archivos coloniales españoles celosamente guardados. Tanto para las ciencias sociales como para la geografía.
Después de mudarse a Berlín en 1827, y simultáneamente con las últimas revisiones de los resultados de su expedición al nuevo continente, Humboldt retomo la idea de su proyecto de expedición a Asia. Ya en 1811 y posteriormente en 1818, le habían sido propuestos ante su iniciativa, primero por el gobierno ruso del zar Nicolás I y luego por el gobierno prusiano, sin embargo, en cada ocasión se interpusieron circunstancias adversas que no permitieron materializar la expedición. Pero en 1829 fue distinto, en esta ocasión, luego de recibir una oferta del ministro de finanzas ruso, el conde Georg de Cancrin a nombre del zar Nicolás I, Humboldt actualizó la planificación del proyecto expedicionario a Asia y adecuó los detalles a los planteamientos, exigencias y condiciones del gobierno ruso. En una carta de aceptación, Humboldt refirió a Cancrin, que se encontraba en buen estado de salud, a pesar de su avanzada edad, aun camino muy ligero a pie, hasta por nueve o diez horas sin descansar.
Gustav Rose (izquierda) Mineralogista alemán. Christian Gottfried Ehrenberg (derecha). Naturalista, zoólogo, anatomista comparado, geólogo y microscopista alemán. Compañeros de Humboldt en la expedición a Asia Central. Crédito de las imágenes: Dominio público en internet.
La exploración en terrenos de Asia Central inició en abril de 1829. Humboldt, acompañado por el mineralogista Gustav Rose y el botánico Christian Gottfried Ehrenberg, se instalaron poco más de dos meses en un asiento minero de los montes Urales en Siberia, donde buscaron otros yacimientos minerales asociados a las minas de carbón y platino. Finalmente la búsqueda dio frutos al conseguir oro, otros yacimientos de platino y diamantes. Durante su estadía allí, también realizaron estudios botánicos y ambientales.
Mapa de la Expedición de Alexander von Humboldt a Rusia en 1829. Crédito de la imagen: Dominio público en internet.
Una vez cumplida esta petición previa del ministro ruso Cancrin, se dirigieron a San Petersburgo, donde en junio de 1829 empezó formalmente la expedición, la cual recorrería los territorios de Asia Central del imperio ruso. Dos eran las metas principales, realizar para el gobierno ruso una prospección minera, y para Humboldt, llevar a cabo estudios botánicos, geológicos y recabar información complementaria a la obtenida en los trópicos americanos, con el objeto de determinar diferencias ideológicas, culturales y políticas, que le permitieran inferir sobre los enfoques socioeconómicos y productivos de cada región y forma de gobierno. Sin embargo, la expedición tutelada, las condiciones impuestas, algunas de las cuales prohibían explícitamente a Humboldt que no debía investigar los problemas sociales, ni criticar las condiciones de la población rusa y/o los métodos de producción implementados por el gobierno, además de la guerra entre el Imperio Ruso y el Imperio Otomano, no le dieron a Humboldt mayor libertad de comunicación con la gente a lo largo de su viaje, no pudiendo conocer a ciencia cierta sobre aspectos sociales, la educación y la democracia.
Cuando estaba en Tobolsk, el punto planificado más lejano del viaje, Humboldt le escribió al ministro ruso Cancrin que iba a extender su trayecto, pese a un brote de ántrax del cual le habían informado. Sabiendo que la misiva no le llegaría a tiempo para echar por tierra el plan, la picardía y arrojo del explorador le permitieron alcanzar las fronteras próximas del imperio ruso con Kazajistan, Mongolia y China. En sus notas registró “A pesar del peligro, a mi edad, no hay que posponer nada".
Un fruto de esa extensión del viaje, lo obtuvo a las orillas del río Irtysh en Mongolia. Allí se encontró con Qinfu un burócrata del gobierno chino, con quien intercambio sus ideas y recibió una colección de cuatro volúmenes de clásicos chinos, representativos de esa cultura.
Algunos otros puntos alcanzados por la expedición fueron las riberas de los ríos Obi, Yenisei y Neva, el macizo del Altái, Dzhungaria (frontera con China), el lago Baikal y Astracán en el mar Caspio.
Finalmente, en noviembre de 1829, luego de recorrer más de 16.000 km en menos de seis meses, arribó a San Petersburgo, donde fue recibido con honores por la nobleza, pronunció un discurso en la Academia Imperial de Ciencias, resaltando la importancia de la colaboración científica internacional. De esta manera terminada la segunda y última gran expedición de Humboldt.
El viaje fue demasiado rápido para ser lo científicamente rentable que Humboldt esperaba. Pese a ello se logró la corrección de la prevalente estimación exagerada de la altura de la meseta de Asia Central, el descubrimiento de diamantes en los lavados de oro de los Urales según su predicción, así como el de otros yacimientos de platino. Sugirió e hizo un esbozo de una red masiva de instrumentos para evaluar el enigma de los niveles cambiantes del Mar Caspio. Además, documentó que en su visita a las minas de Siberia, observó que la obtención de energía tenía efectos en la naturaleza, reseñando “La ineficiencia de las empresas estatales del imperio explota a sus trabajadores, quienes consumen demasiada leña, produciendo extensas desforestaciones y alterando significativamente el medio ambiente”.
En los dos libros preliminares que surgieron de la expedición, publicados en 1831 en Paris y Tubinga, Humboldt enfatizó que los humanos estaban afectando el clima por tres vías: a) deforestación, b) irrigación, y c) liberación de vapor y gases en los centros industriales.
Se pueden “verificar transformaciones”, resume Humboldt, “que el hombre produce en la superficie de los continentes cuando tala los bosques, modifica la distribución del agua y despide a la atmósfera grandes cantidades de vapores y gases en los grandes centros industriales”. Se trata de “significativas transformaciones en la constitución de la envoltura terrestre”, es decir: la atmósfera. Humboldt bosquejó así, nada menos que la teoría del cambio climático producido por el hombre.
Para 1830 Humboldt se convirtió en consejero del rey de Prusia y adquirió una creciente influencia en la corte.
La continuidad en las investigaciones sobre el geomagnetismo, lo llevó finalmente en 1838, al descubrimiento del polo magnético terrestre. Trabajos complementarios sobre el magnetismo de las rocas en los Alpes, le permitieron descubrir que el campo magnético de la Tierra invierte su polaridad. Este descubrimiento fundamental permitió a los geólogos del siglo XX probar la teoría de la deriva continental. Investigaciones posteriores le permitieron desarrollar la idea de ondas sísmicas que viajan a través de la superficie de la Tierra después de un terremoto. A lo largo de su vida, realizó más de cuatro mil experimentos sobre electricidad y magnetismo.
En 1843 publicó en París su trabajo completo sobre su segunda expedición, un compendio de tres volúmenes denominado Asie Centrale (Asia Central). En este trabajo Humboldt se sirve de técnicas sutiles para plasmar una crítica indirecta, debido a las limitaciones que tuvo su trabajó, motivado a una fuerte presión política del modelo de gobierno de Rusia y por la guerra presente en los territorios bordeantes al mar negro. En su Asie Centrale, Humboldt concluyó que en una economía de monopolios estatales, generar energía era poco eficiente y es causa de la destrucción del medio ambiente. Si el progreso en general sigue este patrón a nivel mundial, en el futuro sus efectos no serán locales, ni regionales, el mundo entero vivirá los efectos inevitables de un cambio en el clima.
Ya desde 1834, había empezado a escribir la obra que tendría la mayor repercusión y que le tomaría las últimas dos décadas de su vida, Kosmos (Cosmos), esta obra comprendía un panorama de la descripción física del universo. Ese mismo año se acuñó la palabra científico, con lo que también surgió la profesionalización de la ciencia y su segregación en áreas temáticas concretas. Con Cosmos, Humboldt pretendía lo contrario. Al explicar la etimología de cosmos, que implicaba belleza y orden, el esperaba englobar al cielo y la tierra como una unidad. Para escribir la obra, consultó a los especialistas más connotados ya que no podía tener el mismo dominio en todas las disciplinas, e incluso asistía a cursos para complementar su educación. Cosmos se publicó en cinco volúmenes entre 1845 y 1862), en Stuttgart. El quinto volumen de Cosmos fue póstumo y se completó en base a las notas de Humboldt. Para 1851 la obra ya se había publicado en 11 idiomas.
Asia Central y Cosmos, son las dos obras emblemáticas de Humboldt, debido a que ambas cubren una amplia gama de los fenómenos físicos y humanos estudiados por el científico a lo largo de su vida.
Asie Centrale / Asia Central (izquierda) y Kosmos / Cosmos. Imágenes que corresponden a publicaciones del siglo XIX. Crédito de las imágenes: Dominio público en internet.
Apenas cumplidos los 80, Humboldt mostró insatisfacción con las revoluciones y los revolucionarios: Napoleón, Bolívar, los Estados Unidos, se habían tornado dictatoriales o imperiales al paso del tiempo.
El 24 de febrero de 1857, Humboldt sufrió un infarto leve, que pasó sin síntomas perceptibles. No fue hasta el invierno de 1858-1859 que su fuerza comenzó a decaer; el 6 de mayo de 1859, murió pacíficamente en Berlín, a la edad de 89 años. Se informó que sus últimas palabras fueron "¡Qué gloriosos son estos rayos de Sol! ¡Parecen llamar de la Tierra a los Cielos!". Sus restos fueron transportados por las calles de Berlín, en un coche fúnebre tirado por seis caballos. Los chambelanes reales encabezaron el cortejo, cada uno encargado de llevar una almohada con las medallas de Humboldt y otras condecoraciones de honor. La familia extendida de Humboldt, descendientes de su hermano Wilhelm, caminaron en la procesión. El ataúd de Humboldt fue recibido por el príncipe regente en la puerta de la catedral. Fue enterrado en el lugar de descanso familiar en Tegel, junto a su hermano Wilhelm y su cuñada Caroline.
Humboldt fue una influencia importante en grupos como los románticos ingleses y los trascendentalistas estadounidenses, así como en los viajes y obras de Charles Darwin.
Gran parte de la vida privada de Humboldt sigue siendo un misterio porque destruyó sus cartas privadas. Si bien tuvo una personalidad sociable, pudo haber albergado un sentido de alienación social, lo que impulsó su pasión por escapar a través de los viajes.
Humboldt nunca se casó, aunque estuvo encantado con varias mujeres atractivas, incluida Henriette, la esposa de su mentor Marcus Herz. Pese a ello, obtuvo una gran felicidad de las amistades con colegas y sus familiares por parte de su hermano.
Henriette Herz (izquierda) y su cuñada Caroline von Humboldt (derecha), fueron dos de las mujeres más significativas y allegadas en la vida de Alexander von Humboldt. Crédito de las imágenes: Dominio público en internet.
Su cuñada Caroline von Humboldt fue muy allegada a él, conocedora de su forma de ser, su personalidad y sus sueños. Ella declaró alguna vez que "nada tendrá una gran influencia en Alexander si no viene a través de los hombres".
Cuatro años antes de su muerte, Humboldt ejecutó una escritura de donación transfiriendo todas sus propiedades a Seifert, su criado y compañero, cuya hija era además su ahijada.
Los 23 volúmenes de sus descripciones de viajes publicados entre 1805-1834, son los más completos jamás realizados por un particular. Colaboró con eruditos alemanes, franceses y británicos para producir el último gran logro de la República de las Letras del siglo XVIII y así combinó de manera característica la idée encyclopé-dique (Idea de Enciclopedia Científica) con su creencia en la división del trabajo entre especialistas.
Humboldt refutó de manera convincente la teoría de las etapas económicas de Friedrich List, quien consideró general la transición social de los medios de producción en términos del desarrollo del capital material, como había ocurrido en Europa; mientras que Humboldt, demostró que tal transición no estaba predefinida ni seguía un esquema rígido, puesto que en América la economía evolucionó saltándose las etapas intermedias asociadas a medios de producción que no existieron en el nuevo continente.
Los politólogos deberían apreciar que Humboldt fue uno de los primeros europeos en predecir un gran futuro para Estados Unidos. La publicación de sus viajes también brindó ayuda intelectual y apoyo moral a las guerras de independencia de América del Sur.
Los esfuerzos de Humboldt en el campo de la demografía tuvieron un valor duradero. Introdujo las tasas estadísticas de población, densidad de población, países uniformemente poblados, desigualmente poblados y escasamente poblados. También tuvo en cuenta la dinámica de la población, proporcionando tasas de natalidad y mortalidad.
En resumen, Alexander von Humboldt fue una de las figuras más importantes de la historia, y en particular de la historia de las ciencias naturales. Fue uno de los últimos eruditos universales y sus contribuciones han sido apreciadas desde entonces. Incluso hoy en día la gente está fascinada por sus logros como científico natural, explorador, investigador, aventurero, geólogo y humanista. Alexander von Humboldt es ampliamente reconocido como el fundador de los estudios regionales modernos. Inició la popularización de la ciencia, y al hacerlo, anticipó una visión ecológica de la naturaleza y una comprensión del impacto de la tecnología en la sociedad. Desde siempre, Humboldt intentó comprender, reflexionar y explicar a través de las ciencias a la naturaleza en su conjunto, por ello se abocó a trabajar integral y sistémicamente en múltiples áreas: etnografía, antropología, física, zoología, climatología, oceanografía, astronomía, geografía, geología, mineralogía, botánica, vulcanología y humanismo.
La gran cantidad de publicaciones, estudios y aportes científicos que Humboldt hizo a las ciencias y a la humanidad, le hicieron merecedor a lo largo de la historia y alrededor de todo el mundo, de numerosos y variados reconocimientos y honores. Entre estos figuran: especies biológicas, elementos geográficos, parques y reservas naturales, localidades, calles, buques, cuerpos espaciales, universidades, institutos, colegios, etc. Asimismo, su figura ha sido reproducida en sellos, estampillas y billetes. Debido a la larga lista de todas sus distinciones y publicaciones, se hace difícil reseñarlos sin que se escape alguno, además de que la misma resulta en decenas de páginas. En este material mencionamos las más notables y conocidas. Un extenso recuento de estas puede encontrarse en el sitio https://en.wikipedia.org/wiki/Alexander_von_Humboldt
Membresías.
La Real Sociedad de Londres, Academia de Ciencias del Reino Unido (Royal Society).
La Sociedad Filosófica Americana en Filadelfia.
La Academia de Ciencias de Prusia.
La Sociedad Americana de Anticuarios.
La Sociedad Linneana de Londres.
La Sociedad Histórica de Nueva York.
Miembro honorario de la Academia Estadounidense de Artes y Ciencias.
La Sociedad Etnológica Estadounidense.
La Sociedad Estadounidense de Estadística y Geografía.
La Real Academia Sueca de Ciencias.
Medallas y títulos.
1827, recibe la nacionalidad mexicana.
1829, Doctorado Honoris Causa de la Universidad de Dorpat.
1850, es nombrado Caballero de la Gran Cruz de la Orden de los Santos Mauricio y Lázaro.
1852, recibe la Medalla Copley de la Real Sociedad de de Londres.
1854, recibe la gran cruz de la orden de Guadalupe, en Santa Anna.
1859, el presidente mexicano Benito Juárez lo declaró Benemérito de la Patria.
1863, es nombrado Caballero de la Gran Cruz de la Orden Imperial de Guadalupe.
Especies que llevan su nombre.
Spheniscus humboldti — Pingüino de Humboldt.
Dosidicus gigas — Calamar de Humboldt.
Lilium humboldtii — Lirio de Humboldt.
Phragmipedium humboldtii — Orquídea.
Quercus humboldtii —Roble sudamericano (andino).
Conepatus humboldtii — Mofeta de nariz de cerdo de Humboldt.
Annona humboldtii — Árbol o arbusto frutal neotropical.
Salix humboldtiana — Sauce sudamericano.
Inia geoffrensis humboldtiana — Delfín del Orinoco (rio Amazonas y cuenca del río Orinoco).
Rhinocoryne humboldti y Bathybembix humboldti — caracoles marinos.
Hylocharis humboldtii — Colibrí de Humboldt.
Casignethus humboldti — Escarabajo.
Elzunia humboldt — Mariposa.
Características geográficas que llevan su nombre.
Bahía de Humboldt — Bahía en el norte de California, Estados Unidos.
Glaciar Humboldt — Groenlandia.
Río Humboldt y lago Humboldt — Nevada, Estados Unidos.
Pico Humboldt — 4940 m. Mérida, Venezuela
Cordillera East y West Humboldt en Nevada, Estados Unidos.
Sima Humboldt, sumidero en Venezuela.
Monumento Nacional Alejandro de Humboldt — Caripe, Venezuela.
Monte Humboldt — 1617 m. Nueva Caledonia.
Montañas Humboldt — montañas antárticas.
Humboldt Falls — Cascada de 275 m. Parque Nacional Fiordland, Nueva Zelanda.
Parque estatal Humboldt Redwoods — California, Estados Unidos
Corriente de Humboldt — Actualmente con el nombre de Corriente oceánica del Perú.
Alejandro de Humboldt National Park, Cuba.
Bosque Nacional Alexander von Humboldt, Perú.
Bosque Nacional Humboldt — Toiyabe. Nevada y California, Estados Unidos.
Características astronómicas.
Mare Humboldtianum (mar lunar).
54 Alexandra (asteroide).
4877 Humboldt (asteroide).
Universidades, colegios y escuelas.
La Universidad Humboldt de Berlín, Alemania.
Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt, Bogotá y Villa de Leiva, Colombia.
Universidad Alejandro de Humboldt, Caracas, Venezuela.
Escuela Alexander-von-Humboldt-Gymnasium, Konstanz, Alemania.
Escuela Internacional Alemana, Montreal, Canadá.
Colegio Alemán Alexander von Humboldt, Ciudad de México, México.
Colegio Humboldt, São Paulo, Brasil.
Colegio Peruano Alemán Alexander von Humboldt, Lima, Perú.
Colegio Humboldt, Costa Rica.
Colegio Alemán Humboldt, Guayaquil, Ecuador.
Barcos
Alexander von Humboldt fue un barco científico. 1906 — 1986.
Alexander von Humboldt es un Barco — Velero de tres mástiles lanzado en 1988.
Dedicatorias y citas de personajes celebres.
Edgar Allan Poe dedicó su última gran obra, Eureka: A Prose Poem, a Humboldt, "Con muy profundo respeto". El intento de Humboldt de unificar las ciencias en su Kosmos fue una gran inspiración para el proyecto de Poe.
Simón Bolívar escribió que "el verdadero descubridor de América del Sur fue Humboldt, ya que su obra fue más útil para nuestro pueblo que la obra de todos los conquistadores".
Charles Darwin expresó su deuda con Humboldt y su admiración por su trabajo, escribiendo a Joseph Dalton Hooker que Humboldt era el " mayor viajero científico que jamás haya existido".
Johann Wolfgang Goethe reseño que "Humboldt nos colma de verdaderos tesoros".
Friedrich Schiller escribió que "Alexander impresiona a muchos, especialmente cuando se le compara con otros, ¡porque luce más!"
José de la Luz y Caballero escribió que "Colón le dio a Europa un Nuevo Mundo; Humboldt lo dio a conocer en sus aspectos físicos, materiales, intelectuales y morales".
Thomas Jefferson comentó "Lo considero el científico más importante que he conocido".
Emil Du Bois-Reymond escribió que "Todo científico es descendiente de Humboldt. Todos somos su familia".
Robert G. Ingersoll escribió que "él era para la ciencia lo que Shakespeare era para el drama".
Esculturas e imágenes graficas.
Un sello postal de 1959 de la Unión Soviética.
Busto de Humboldt en la Universidad de La Habana, Cuba.
Estatua de Humboldt en Budapester Strasse, Berlín.
Estatua en la Universidad Humboldt de Berlín.
Busto de Humboldt en Central Park, Nueva York.
Estatua de Humboldt en Alameda Central, Ciudad de México.
Monumento en El Ejido Park, Quito, Ecuador.
Obras y trabajos científicos.
La obra bibliográfica es extensa. Sin embargo, son tres las obras que se pueden considerar como extremas o maestras:
La primera de ellas escrita originalmente en francés y titulada Le voyage aux régions equinoxiales du Nouveau Continent (Viaje a las regiones equinocciales del Nuevo Continente), escrita entre 1799-1804, por Alexander von Humboldt y Aimé Bonpland. Publicada en París, 1807. 30 volúmenes.
La segunda obra es Asie Centrale, edición completa publicada en Paris, en 1843. 3 volúmenes.
La tercera obra de gran importancia y sin duda la de mayor relevancia, es Kosmos. Con esta obra Humboldt corona su vida y su trabajo.
Además de este notable trío de obras, se cuentan otros más de 500 títulos, trabajos científicos, manuscritos, notas, bosquejos y diseños en Zoología, Anatomía comparada, Botánica, Naturaleza, Astronomía, Mineralogía, Electroquímica del sistema nervioso (galvanismo y conductividad), Geografía, Política, Geología, Geomagnetismo, Fisiología química de las plantas, Corrientes marinas, Líneas isotérmicas y distribución del calor en el globo, Vulcanismo, Fenómenos de la creación y la evolución, Desarrollo sociopolítico y socioeconómico de los estados y las regiones. Evolución de medios de producción, Distribución de las plantas y animales sobre la tierra, Afectación del clima y Cambio climático.
REFERENCIAS
https://www.infoplease.com/encyclopedia/science/biology/bios/humboldt-alexander-freiherr-von
https://biography.yourdictionary.com/alexander-von-humboldt
https://www.famousscientists.org/alexander-von-humboldt/
https://www.britannica.com/biography/Alexander-von-Humboldt
https://es.wikipedia.org/wiki/Alexander_von_Humboldt
https://en.wikipedia.org/wiki/Alexander_von_Humboldt
https://www.goethe.de/ins/br/es/kul/fok/hja/21709530.html
